hoy he pensado mucho en rodolfo morales. me parecen tan hermosos sus cuadros, son mágicos, es como si los atravesara al verlos y flotara en ríos de pintura que cayeran de pinceles estratosféricos. queda poco para que se vaya diciembre, me dará tristeza y no entiendo por qué. supongo que esta será la última entrada de este año que creo que no echaré de menos. anoche atravesé la vía láctea, pero usé un batiscafo malherido y acabé naufragando entre los metacarpos de un sistema solar que se cerraron y me atraparon en la palma de su mano que en realidad era una telaraña de planetas que lloraban porque alguien les había robado su gravedad y ahora no podían atrapar rayos de sol y temblaban como pulpos sobre la bóveda celeste en busca de algún gramo de gravedad sobrante. soy un músculo colgando del fin del infinito y algún día atravesaré el océano de la imposibilidad y me instalaré en la aurora boreal o en alguna galaxia lejana, tan lejana que no la pueda alcanzar ni el pensamiento. queda tan poco para el comienzo de las clases y no quiero para nada que empiecen. me caen mal las fiestas universitarias y ya a partir de ahora no daré ninguna excusa para no ir. supongo que soy una tipa rara por no querer salir y preferir quedarme en casa leyendo o mirando la pared oyendo música. sí, soy una tipa rara, y qué.