david se llama el amor de mi vida. echo de menos a david. quiero a david. pienso en david. david, david, ocupas un tercio de mis pensamientos, querido, el resto lo dedico recordandote como una tonta y haciendo malabares con tus sonrisas y tu mirada de terciopelo verde. me encuentro suspendida de un resorte cardiaco algo debil que tartamudea como quéseyo y me marea como si estuviera haciendo circulos y circulos en una noria de feria veraniega a las afueras de una ciudad con tentaculos. ah, maldita sea. te quiero, david. no sé. estoy estornudando y pienso en tí y me pican las rodillas y me hacen consquillas tus palabras. ahgr.
esta nevando. miento. estan cayendo del cielo hipopotamos en paracaidas naranjas. miento. truenos. miento. pulpos de plastico bailando chachacha o...vocales en forma de consonantes, o consonantes en forma de vocales, resonancias magneticas y nadas, nadas, muchas nadas aterrizando por aca con una velocidad hipersonica, como las termitas colgadas de mi pared y que tienen adentro bostezos embutidos en trajes aeroespaciales...y tambien fechas que nunca podre olvidar...miento. estoy triste y tengo esa cosa que llaman depresion post vacacional. esta vez no miento. me duele la cabeza. tampoco miento ahora.
siento que he cambiado muchisimo.
tengo ganas de que llueva una eternidad.
