hoy me he dado cuenta más que nunca que consigo satisfacción en las relaciones personales únicamente si hay dolor de por medio, decepción y mucha, mucha dependencia emocional. sé que está mal, y soy consciente de que con eso consigo tan solo destruirme a mí misma, pero soy incapaz de ser normal, de buscar la estabilidad y de querer pasear de la mano por el parque con un novio cualquiera que me escriba poemas y me diga que soy tan especial. sin embargo, sé que podría perfectamente sentirme bien con alguien que me rompiera el corazón a cada instante para que luego pueda yo recoger los pedacitos y juntarlos y pegarlos entre sí con chicle, y que luego me lo vuelva a romper en miles de pedazos, y que así esté presa de esta espiral de sufrimiento y conducta típica de una niña inmadura que nunca querrá crecer.