24 junio 2009

es este amor cósmico que cae sobre mí con un sabor a ti, nos llevará muy lejos porque ya es tiempo de cambiarnos por los que están allí, tu gloria es mi gloria que es este éxtasis en el que todas las cosas que alguna vez estallaron en nuestras mentes se comprimen en un sólo punto, en un centímetro de vida que lo es todo y es la nada brotando entre sus carnes rosadas, el fruto que jamás probaron las horas pasadas ahora ansía de ti, pero ya extasiado, maniatadas están las nubes y como granizo nos deshacemos sobre el papel de seda de nuestra aventura, pero a partir de esto, más allá de este desvarío, el ciclo de la vida siempre es el que siempre fue y siempre será, no imagines, imaginemos, no imaginemos, imagíname imaginarte, yo mientras te imaginaré imaginarme, el sueño entre mis venas ahora es un castillo que se levanta hasta tocar el cielo, el sueño de tus pupilas son playas que nutren mis muslos en esta noche sin noche, sin nada más que el vacío, sólo el recuerdo de ti en mi y mi recuerdo de mi en tí que es un invento a las orillas de mis delirios, un decoupage impregnado de ficciones que se pelean por convertirse en realidades, todos los destinos encauzados en un mismo jirón de fábulas que me alimentan toda la puta rutina para encarcelarme dentro de mi propia soledad, que nunca jamás estuvimos tan juntos como en este racimo de letras condenadas a morir entre los pliegues de mi desprecio, que el sol ya no me llama, y yo tendré que ir a buscarlo antes de que amanezca.